Los niños confundieron el preservativo con un globo y se lo metieron en la boca, por lo que han tenido que realizarles pruebas en el hospital
Dos alumnos de cuatro años del CEIP Miguel Hernández de Sevilla han tenido que ser atendidos y sometidos a varias pruebas médicas tras haber jugado con un condón usado que contenía restos de semen dentro del arenero del centro ubicado en el polígono de San Pablo el pasado 21 de febrero.
Los pequeños encontraron el profiláctico enterrado en la arena y, pensando que era un globo, se lo llevaron a la boca para tratar de inflarlo. Los progenitores conocieron el caso gracias a que uno de los menores de edad se guardó el condón en el bolsillo y se lo enseñó a su madre a la salida del colegio. Aunque uno de ellos negó haberlo cogido, sí manifestó que había encontrado otro ‘globo de color rosa’, o obstante no se ha podido aclarar si se trataba de otro preservativo o no.
Ante los hechos acaecidos, los progenitores de los menores decidieron trasladarlos a Urgencias para que fueran sometidos a distintas pruebas médicas, entre ellas la del VIH y la hepatitis, en las que ambos han dado negativo. Asimismo, se les aplicó un tratamiento contra enfermedades de transmisión sexual, que provocó algunos efectos secundarios en los niños. No obstante, para estar totalmente seguros, los jóvenes deben volver a pasar una segunda evaluación en pocos días.